No invasivo: La aplicación de Botox es una opción de tratamiento no quirúrgico. Se realiza con una aguja y suele provocar mínimas molestias.
Resultados rápidos: El Botox suele hacer efecto inmediatamente después de su administración. Esto permite a los pacientes experimentar un alivio rápido y una mejora estética.
Efecto duradero: El Botox puede mantener su efecto durante meses tras su administración. Esto puede reducir los tratamientos que requieren visitas repetidas.
Varias zonas de aplicación: El Botox tiene varias zonas de aplicación y los dentistas pueden personalizar este tratamiento para adaptarlo a las necesidades específicas de los pacientes